DISPUTACIÓN
Según los historiadores de la filosofía medieval, la disputación (disputatio) surgió como una ampliación de la cuestión (quaestio) y de la lección (lectio). He aquí una breve explicación de tal proceso, con indicaciones acerca de cada una de las citadas formas, y de algunas otras estrechamente relacionadas con ellas.
La lectio era la lectura de textos. En principio, la lectura era «literal» y neutral. Pero no hay ninguna lectura completamente neutral; la propia entonación destaca unos aspectos y deja en la penumbra otros. Además, las dificultades de comprensión de algunos pasajes obligan a repetir y a intentar aclarar el texto. Hugo de San Victor (Didascalion, Lib. I, c. 1) decía que hay dos cosas que hacen posible la adquisición de la ciencia: una es la citada lectio; la otra, la meditación (meditatio).
Con ello la meditatio apareció como una primera ampliación de la lectio. Pero tampoco resultó suficiente. Tan pronto como se amplió