INCOGNOSCIBLE

Se llama «incognos­cible» lo que no se puede conocer, o lo que se supone no se puede conocer. El concepto de «incognoscible» puede tomarse en un sentido relativo o en uno absoluto. En el primer sen­tido, algo es, o es declarado, incognoscible dentro de cierto contexto o en una determi­nada época, pero no necesariamente en cual­quier contexto y en toda época. En el segundo sentido, algo es, o es declarado, incognoscible en todos los momentos y desde cualesquiera puntos de vista. En esta segunda acepción de «incognoscible», se considera incognoscible lo que no se puede ni podrá nunca conocer, o lo que se supone que no se puede ni se podrá conocer nunca.

Los filósofos que han recurrido al concepto de «incognoscible» han tendido a emplear el sentido absoluto del mismo. Entre los filóso­fos que han empleado este concepto destaca Herbert Spencer, el cual titula «Lo Incognos­cible» (The Unknowable) la primera parte de sus Primeros Principios (First