PARTICULAR
Tradicionalmente, los juicios o proposiciones particulares son los que afirman o niegan un predicado de uno o varios sujetos. Ejemplos de tales juicios o proposiciones son: «Santiago es irritable», «Algunos griegos son irritables», «Santiago no es irritable», «Algunos griegos no son irritables».
A veces se dice que los juicios o proposiciones particulares son los que afirman un predicado de uno o varios sujetos. Ejemplos son los citados «Santiago es irritable», «Algunos griegos son irritables». En este caso se considera que negar un predicado de uno o varios sujetos consiste en anteponer ‘no’ al predicado, ya sea sólo al adjetivo que sirve de predicado —como en «Santiago es no irritable», «Algunos griegos son no irritables»—, sea, más idiomáticamente (en español), y también más en consonancia con el modo moderno de entender ‘predicado’, a la cópula y al adjetivo; como en «Santiago no es irritable», «Algunos griegos no