PROBLEMA
En Top., I, 4, 101 b 29 Aristóteles escribe: «La diferencia entre el problema y la proposición depende del modo como se plantea la cuestión. Si se dice, por ejemplo: ‘¿No es verdad que animal pedestre y bípedo es la definición del hombre?’, tenemos una proposición. Si se dice, en cambio: ‘¿Es o no la definición del hombre, animal pedestre y bípedo?’, tenemos un problema.»
Aristóteles mantiene con ello que mientras una proposición (o una definición propuesta) es algo «dado» —es una «tesis»—, que se trata de aceptar o rechazar, probar o refutar, etcétera, un problema no es propiamente una proposición (o una definición), por lo menos en el sentido usual de estos términos (aunque puede llamarse «proposición» en cuanto que es algo que se «propone»). En el problema se admiten dos tesis distintas y opuestas y, de consiguiente, no puede, en rigor, aceptarse o rechazarse, probarse o refutarse lo que se presenta como un problema. Sólo