SABER
El vocablo ‘saber’ (usado a veces como verbo y a veces como sustantivo: «el saber») se equipara con frecuencia al término ‘conocimiento’. Sin embargo, es muy común en la literatura filosófica de varias lenguas (por ejemplo, español, francés, alemán) emplear ‘saber’ en un sentido más amplio que ‘conocimiento’. De acuerdo con ello, mientras el conocimiento se refiere a situaciones objetivas y da lugar, una vez debidamente sistematizado, a la ciencia, el saber puede referirse a toda suerte de situaciones, tanto objetivas como subjetivas, tanto teóricas como prácticas. En este amplio sentido se usan locuciones tales como ‘saber a qué atenerse’ —que, según Ortega y Gasset, constituye la raíz de todo saber—, ‘saber cómo comportarse’, etc.
Entendido en un sentido muy amplio, el saber es un «contacto con la realidad» con el fin de discriminarla; el término ‘saber’ está relacionado con ‘sabor’, y este último